Los 5 trastornos más comunes entre los adolescentes
Uno de cada siete jóvenes de 10 a 19 años padece algún trastorno mental según el último estudio de la Organización Mundial de la Salud.
Chiara Pellinacci Miércoles, 05 de Abril de 2023No ocuparse de los trastornos de salud mental, especialmente en el caso de adolescentes y los jóvenes, puede tener consecuencias graves en la edad adulta. Los trastornos de salud mental perjudican también la salud física y dificultan las posibilidades de llevar una vida plena.
La falta de prevención, detección temprana y visibilidad e información sobre los principales trastornos mentales deriva en una cifra escalofriante: el suicidio es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años según la Organización Mundial de la Salud.
Algunos de los trastornos más comunes entre los adolescentes son los siguientes: depresión, ansiedad, abuso de sustancias, trastorno disocial y alimentarios o TCA. Te explicamos algunos de los síntomas y características principales de cada uno de ellos.
Depresión mayor y distimia
Aunque también existe un factor biológico, el aumento de casos en los últimos años está estrechamente relacionado con el alto consumo de pantallas, especialmente entre los más jóvenes. Los síntomas de la depresión, tanto en adolescentes como personas adultas, son un estado de ánimo deprimido, es decir, tristeza, desesperanza, un sentimiento de vacío y la pérdida de interés por realizar actividades. Esos son los síntomas principales, pero también se pueden dar otros como: cambios a la hora del sueño, cambios en el apetito, bajo rendimiento o síntomas de ansiedad.
Trastorno de ansiedad generalizada
Casi todas las personas padecen de ansiedad en algún momento de su vida, el problema es cuando este estado ansioso se prolonga en el tiempo e interfiere con la vida cotidiana. Este trastorno se puede desarrollar tanto en la niñez como en la edad adulta y para las personas que lo sufren tienen ansiedad aunque no haya motivos evidentes hasta tal punto que a veces las preocupaciones les consumen por concreto. Los síntomas más habituales son: una ansiedad persistente y desproporcionada con la realidad, pensar demasiado los planes y buscar soluciones a las peores situaciones posibles, dificultad para gestionar la incertidumbre, etc. Además, también puede conllevar síntomas físicos como fatiga y sudoración.
Abuso y dependencia de sustancias
La adolescencia es la edad en la que más vulnerables somos al abuso de sustancias debido al gran deseo de aceptación social que se suele tener en esta época. Los factores de riesgo para desarrollar adicción a sustancias en la adolescencia son los siguientes: antecedentes familiares, padecer de algún otro trastorno mental, carácter impulsivo, antecedente de eventos traumáticos, baja autoestima o sentimiento de rechazo social. Desarrollar una adicción en edades tempranas además puede suponer el desarrollo de nuevos trastornos mentales. Las drogas más usadas por los adolescentes son el alcohol, el tabaco y la marihuana.
Trastorno disocial y negativista desafiante
Los niños pueden ser difíciles y desafiantes en algunas ocasiones. Pero este trastorno negativista desafiante abarca un patrón frecuente y constante de ira, irritabilidad, discusiones y desobediencia hacia figuras de autoridad. Esto puede generar malos ambientes en los diferentes entornos. Los niños con trastorno disocial parecen carecer de conciencia y, a diferencia de aquellos con trastorno negativista desafiante, violan repetidamente los derechos de los demás, a veces sin ningún signo de irritación. Los niños con trastorno disocial son egoístas e insensibles a los sentimientos de los otros y pueden acosar, causar daños a la propiedad, mentir o robar sin sentirse culpables.
Anorexia, bulimia y trastorno por atracón
La delgadez y la belleza al parecer son esenciales para sentirnos aceptados y parecer exitosos en nuestra sociedad. Muchas marcas femeninas y para adolescentes muestran siempre una presión a favor del adelgazamiento. Las dietas restrictivas, el control del peso, la preocupación por la figura, el miedo a engordar son prácticas y actitudes frecuentes en toda la población y están muy arraigados en nuestra sociedad. Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), entre los que figuran la anorexia y la bulimia, son trastornos psicológicos que comportan anomalías graves en el comportamiento de la ingesta nutricional. La anorexia es un trastorno alimentario que resulta en una pérdida de peso poco saludable. Se restringe la comida y se purgan para alcanzar objetivos de peso poco realistas. En cambio, en la bulimia la persona ingiere grandes cantidades de alimentos, a través de atracones, y luego trata de deshacer los efectos del atracón de alguna manera. Por lo general, la persona desecha con vómitos la comida que comió.